Sonrrisa Brillante

Lucir una sonrisa provocadora, sensual, alegre y llamativa es hoy más posible que nunca. Los grandes avances en el campo de la odontología permiten la colocación de braquets y aparatos de asistencia dental de forma sencilla, y son casi imperceptibles en la mayoría de los casos. Sin embargo, a veces una dentadura pareja queda opacada por dientes manchados, amarillentos y deslucidos. Veamos entonces qué podemos hacer para solucionar este problema que afecta a muchísimas personas.


Hay algo que todos sabemos, pero a lo que a veces no prestamos suficiente atención: las manchas provocadas por las bebidas. Las gaseosas son agresivas con el esmalte de los dientes, lo que facilita que estos se manchen y se vean desmejorados. También el café, el té y el mate dejan residuos que terminan por manchar nuestra dentadura. Claro, el cigarrillo también es un gran enemigo de la belleza bucal. El primer gran consejo es, entonces, mantenerse alejado de estos elementos tanto como sea posible, o procurar higienizar los dientes luego de su consumo.

Al elegir las pastas o cremas dentales, los hilos encerados y el enjuague bucal, procurá escoger aquellos diseñados para el blanqueo de dientes. Estos tienen compuestos activos que higienizan la dentadura, limpiándola profundamente y haciéndolos lucir más blancos y sanos. También recordá utilizar un cepillo de dientes que no sea agresivo ni tenga cerdas demasiado duras, y si te es posible, adquirí los cepillos dentales que poseen accesorios blanqueadores.

Hay otros elementos que podemos utilizar para blanquear la sonrisa, como caramelos y gomas de mascar especiales, que poseen, a su vez, compuestos blanqueadores, que logran despegar de los dientes aquellos restos amenazadores. También podemos recurrir a los ingredientes naturales: las hojas de salvia son muy útiles para blanquear la dentadura. Sólo se debe frotar una hoja contra los dientes, y luego enjuagar, a diario.

El bicarbonato de sodio será también muy útil. Cada vez que cepilles tus dientes, colocá un poco de bicarbonato en un platito y "mojá" en él tu cepillo, y luego cepillá tu dentadura. Esto facilitará la limpieza y la eliminación de restos amenazadores, blanqueando tus dientes.

Por último, el mejor aliado para la salud y la belleza bucal es un cuidado apropiado. Cepillá tus dientes luego de cada comida, al levantarte de la cama y antes de acostarte. A diferencia de otros rituales de higiene, el cepillado de los dientes puede hacerse tan a menudo como quieras o necesites, sin causar ninguna agresión a tu sonrisa.